miércoles, 22 de mayo de 2013

Y ahora Aznar. ¡Lo que nos faltaba!


 Hoy, Nicolás, déjame que te hable a ras de mis sintimientos y al margen de las polémicas dominantes. establecidas. Gracias.
Anoche, Aznar, en una entrevista en Antena 3, nos amenazó con la posibilidad de volver otra vez a ponerse al frente del PP. Yo, sin embargo, lo daba en Irák buscando las armas de destrucción masiva! Y no veas hoy los medios, todo el día dale que te pego haciendo conjeturas, que si Rajoy, que si Aznar, que si patatín, que si patatán.
Aznar y Rajoy o Caifás y Pilatos, -¿qué más da?- me dan lo mismo. A mí, Nicolás, no me interesan nada las disquisiciones acerca de qué políticos son malos y cuales son todavía peores. Mi opinión y mi deseo es que se vayan a casa o la cárcel, según proceda, todos los dirigentes políticos de cualquier partido que estén implicados en la toma de decisiones de alguna de las tropelías que le han hecho a este país y a la inmensa mayoría de su ciudadanía en los últimos tiempos. A saber:

miércoles, 1 de mayo de 2013

Hoy te hablo, Nicolás, de las Plataformas ciudadanas


Hoy te hablo, Nicolás, de las plataformas ciudadanas en España, de esa bocanada de aire fresco, irrupción de brotes verdes -estos, sí- y amplio y digno despertar de la ciudadanía, que supone el surgimiento de los movimientos y plataformas en nuestro país, cuyo grado de aceptación entre la gente es de entre el 70 y el 80%; porcentaje similar al nivel de rechazo que generan los principales partidos políticos y sus líderes en estos momentos; todo ello según las encuestas. Son dos procesos tan espectaculares y tan opuestos, que hasta las ovejas se llevan las patas a la cabeza como decía un amigo de tu padre y el mío cuando quería llamar la atención sobre algo sorprendente. ¿Te acuerdas?
A tal extremo llegan las cosas, que el 57% de la ciudadanía prefiere que la democracia se organice desde las plataformas y no desde los partidos, según la encuesta del último Observatorio de la Cadena Ser. Te doy este dato, Nicolás, a los solos efectos de reflejar la excelente valoración ciudadana de las plataformas, pero me apresuro a manifestarte mi deseo, de que no caiga ninguna plataforma en la tentación de concurrir a las contiendas electorales, porque acabarían perdiendo su naturaleza y, a la par, el apoyo de la ciudadanía del que ahora gozan.