lunes, 8 de febrero de 2010

La falacia del desarrollo y la creación de empleo con el ATC

Se han publicado en muchos medios, Nicolás, los actos que convoca la Plataforma Anticementerio Nuclear de Guadalajara y, además, puedes seguir informándote en su página: cementerionuclearno.blogspot.com.

No me entretengo, pues, en aportarte datos y prefiero dedicar el tiempo a comentarte las razones que, a mi juicio, tenemos los ciudadanos para participar en los actos de la Plataforma y singularmente en la gran manifestación contra la instalación del Cementerio Nuclear en Yebra. Tan sólo recordarte dos fechas: la del 27 de febrero a las 18 horas en Guadalajara, que es el día elegido por la Plataforma para la magna manifestación y también la del día 19, fecha en que la misma dará una charla informativa en Molina (Santa María del Conde, 20 horas), para la gente de esta comarca.

Hoy quiero dedicar unas líneas a la falacia del Ministerio de Industria y de ENRESA que pretenden convencernos de lo siguiente: el cementerio nuclear no supone ningún peligro, ni perjudica al medio ambiente y, además, es muy beneficioso para el municipio donde se instale y para los pueblos de alrededor, porque crea desarrollo y muchos puestos de trabajo fijos.

Si fueran ciertas esas bondades, el premio sería auténticamente extraordinario y dejaría como unos idiotas a los miles de ayuntamientos, que estando tan acuciados o más que el de Yebra y los otros peticionarios, no han querido solicitarlo. Pero es que, además, al municipio elegido le ingresan todos los años en sus arcas municipales un dineral cifrado en cientos de millones de las antiguas pesetas. Y lo reciben, así, por las buenas, sin necesidad de recurrir a las armas para conseguir el botín y sin que se pueda considerar el caso de corrupción, ni de soborno de ediles, ni de nada por el estilo, pues una Orden del Ministro de Industria le da cuerpo legal a tan malévolo e inmoral dispendio del dinero público.

Cuentos de hadas aparte, lo prometido por el Ministerio de Industria y ENRESA en desarrollo y empleo, es pura falacia y una ofensa a la inteligencia de los ciudadanos. Esos empleos fijos que prometen, Nicolás, sean cien o sean quinientos, no son por lo general para trabajadores de la zona, ni tampoco empleos nuevos, sino que se realizarán por los propios trabajadores de las empresas a las que se les asignen las obras, como no puede ser de otro modo; empresas, por otra parte, que vendrán de fuera y que, por el tipo de trabajo a realizar, dispondrán de mucha maquinaria y escasa mano de obra. Y, en cuanto se acabe la construcción de la planta, se marcharán a otra parte y se quedará el pueblo con la misma vida laboral de ahora, pero con un cementerio nuclear por los siglos de los siglos, con todos los peligros y mala imagen que ello conlleve.

Dicen, por otra parte, que harán un centro tecnológico asociado a la planta para investigaciones y estudios nucleares. Pues bien, Nicolás, no creo que ni el más necio de los mortales pueda creerse que eso dará puestos de trabajo a los residentes del pueblo donde esté ubicado el cementerio. Esas son tareas de altísima cualificación, cuyos investigadores vivirán en alguna ciudad y no en el pueblo del cementerio nuclear.


Visto desde el lado económico, que es de lo que hoy hablamos, el pueblo que se cargue con el cementerio y todos los de alrededor, no podrán ya por nunca jamás, potenciar el turismo, ni la agricultura alternativa y ecológica, ni las denominaciones de origen, ni nada que tenga que ver con el desarrollo sostenible, porque el cementerio nuclear, sus peligros y su imagen, lo hacen absolutamente inviable. Es decir, se quedarán peor que los demás pueblos, pero eso sí, con un ayuntamiento millonario para hacerles a las gentes del pueblo todas las excursiones que quieran y cantar el Asturias Patria Querida y, sin duda alguna, que con un empleo garantizado y lo que haga falta, para los ediles que se han prestado a la turbia jugada.

Dentro de dos o tres días te mandaré una carta abierta que le estoy haciendo a la Alcaldesa de Bernuy de Porreros (Soria), que quiso defender el cementerio para su pueblo, pero desde el consenso democrático, la transparencia y la dignidad.

No hay comentarios:

Publicar un comentario