Ayer, Nicolás, en el Palacio de Congresos de Madrid, con un auditorio repleto de dirigentes ex-socialdemócratas como el orador y televisado a todo el país, el Sr. Rubalcaba les tomó el pelo a los millones de potenciales votantes del PSOE que, defraudados, le han echado la espalada a este partido y, a cuya recuperación del voto iba destinado el discurso que pronunció el nuevo candidato del PSOE a Presidente del Gobierno.
Sí, Nicolás, sí, les tomó el pelo, porque quien hacía ayer esas promesas, era uno de los líderes más influyentes y determinantes de los que han formado parte del gobierno que tan mal ha gestiado la crisis, que tantos desatinos ha cometido y cuyas políticas han sido las duras y puras de cualquier derecha.
En la política, como en cualquier orden de la vida, Nicolás, quien te defrauda y traiciona, quien te perjudica y te hace daño, es muy difícil que pueda volver después a recuperar tu confianza. En todo caso, si hay una sola posibilidad de conseguirlo, es reconociendo los errores con sinceridad y pidiendo perdón por la decepción producida y el daño causado.
Por eso, la única manera que tenía Rubalcaba de conseguir algo de credibilidad ante los votantes que ahora pretende recuperar, pasaba, inexcusablemente, por haber empezado haciendo una auténtica autocrítica y pedir perdón por los desaguisados que ha cometido el Gobierno –su Gobierno- en la gestión de la crisis y por la política nítidamente de derechas que ha venido aplicando. Por una política tan sumisa con los poderes económicos y financieros, como dura y perjudicial con los sectores más débiles.
Lamentablemente, Rubalcaba no hizo autocrítica alguna, con lo cual convirtió su discurso en un puro bla, bla, bla, que lejos de recuperar credibilidad en los potenciales votantes defraudados a los que iba dirigido, les ha debido sonar a verdadera tomadura de pelo.
Ni más ni menos. Que el PSOE y su candidato reconozcan primero públicamente sus traiciones al elecotado de izquierdas y después que hablen de futuro.
ResponderEliminarQuienes han sido los colaboradores necesarios para que todo esto pasara no deberían tener ningún futuro en política, pero como en este país no tenemos memoria, seguirán siendo los mismos de siempre los que cambiando el discurso se crean con el derecho y la obligación de seguir dirigiendo el futuro de los demás, que el suyo ya lo tienen bien garantizado. También dijo que pondrá listas abiertas para una mejor elección de los representantes, él, que no dejo que hubiese primarias para tener elección directa y a dedo. Pero somos tan estúpidos que le votaremos. NO merecen perdón ni aunque lo pidan, son muchos años y muchos engaños. Ya esta bien
ResponderEliminarSoy Javier
ResponderEliminarDeclaraciones de Rubalcaba: tuvimos 8 años para pinchar la burbuja y no lo hicimos.
No tiene mérito reconocerlo ahora y no sinceramente, sino por motivaciones electoralistas. No tenéis ninguna credibilidad.
Esperemos que nadie en su sano juicio vote un partido que lleva muchos años engañando a la gente, incumpliendo promesas fundamentales, aquellas que tienen relación con los principios políticos esenciales, y contemporizando con los poderes económicos.
El Psoe empezó a bastardearse políticamente desde los tiempos de ese otro embaucador llamado Felipe González. Todo empezó con el No a la Otan, y luego sí.
Y desde entonces, a contemporizar con las constructoras, con la Otan, con EE.UU y con los mercados.