miércoles, 11 de noviembre de 2020

No hay excusas posibles. España es el peor del mundo gestionando la Pandemia y eso es gravísimo y hay que explicarlo sin tapujos



 

1ª) Nuestro país ha sido el peor del mundo en la gestión de la Pandemia. 
¿Por qué?¿Por qué somos el país q más muertes ha tenido por porcentaje de habitantes, tanto en la primera ola como de pandemia como sumando ambas? 
¿Por qué hemos sido igualmente los primeros de toda Europa en los rebrotes de la segunda.                               

  Son preguntas sobre hechos q asombran y llenan de vergüenza , pero lo cierto es que han acontecido y: O se va al fondo de lo acontecido, o quedarán ocultadas las responsabilidades políticas que las hay, y muy graves, incluso penales y con cárcel en el caso de las Residencias de Mayores por denegación de auxilio hospitalario

2ª) ¿A caso teníamos la peor sanidad del mundo?

¿Verdad que no? ¿Verdad que hay infinidad de sistemas sanitarios peores que el nuestro en muchísimos países del del planeta?. De acuerdo que  nuestra sanidad no es ya la mejor del mundo a causa de los recortes y privatizaciones que ha venido sufriendo, pero aún así,  la de la mayoría de los países, aún es peor que la nuestra. 

Entonces ¿Dónde están las causas de una gestión de consecuencias tan dramáticas, como  para tener la mayor mortalidad del mundo por porcentaje de habitantes y, además, con la economía hecha un desastre y las necesidades sociales más perentorias sin resolver? ¿O es que alguien piensa que porque algunas de ellas estén en el BOE, 
ya están resueltas?

3ª) Vano intento el de esconder los datos reales

¿A quien pretenden engañar si se sabe en todo el mundo que España está escondiendo los datos reales de contagiados y muertos por coronavirus?
¿A qué viene, pues, andar amañando unos datos por  humillante y vergonzoso que sea políticamente el hecho humano de que seamos el país del planeta que más muertes ha tenido por Covid 19? 

¿O es que acaso creen nuestras élites políticas que es posible aún evitar que pasen a la historia sin ser señalados como los peores del mundo salvando las vidas de la ciudadanía a la que representaban? ¿Es que ni siquiera son capaces de ver que la falsa cifra de las 40.000 muertes oficiales que nos danmás las 20.000 personas que murieron en las residencias que están aún sin agregar, supone un porcentaje de muertos por habitantes, que ya nadie cree que se pueda superar. Ojo, que tenemos mas muertes por porcentaje de habitantes que Estados Unidos o Brasil, cuyos presidentes no sólo no combatieron la Pandemia, sino que la estimularon.

¿Y es que no ven tampoco que las cifras citadas siguen siendo todavía muy inferiores  a las más fiables que dan otros organismos serios, entre ellos, el prestigioso Instituto de Investigación Sanitaria del Hospital Clínico San Carlos?

¿Y qué decir de lo  estupefactos que nos quedamos toda la ciudadanía, cuando el propio presidente del gobierno, Sr Pedro Sánchez, nos dijo solemnemente dirigiéndose públicamente a todo el pais en horas de máxima audiencia, que los contagiados no eran un millón, sino tres (No, no son un millón los contagiados, son ya tres millones”) Hemerotecas habemus

4ª) "El virus ya lo hemos vencido, ahora toca restablecer la movilidad y descansar, aunque con prudencia" (palabras del Presidente a finales de mayo)

¿Cómo es posible que el propio presidente nos dijera tal cosa, cuando lo cierto es que el virus no había sido vencido aún en ninguna parte de las que había llegado?¿Acaso no es una verdad demostrada que vencer el virus en cualquier lugar que se haya instalado supone dejarlo reducido a cero casos y, además que pasen al menos otros catorce días sin ningún caso nuevo para asegurarse que no quedan rebrotes.

¿Es que no ha quedado lo suficiente probado que la política, llamada del 14-0 que se aplicó en Asia, Oceanía y el norte de Europa, excepto Suecia, ha sido la única que ha extirpado y vencido al bicho?. Sin embargo, ese no era el caso en ningún lugar de España que, aunque en menor cantidad, todavía seguía el maldito bicho vivito y coleando en todas partes, cosa que, de hecho, se admitía al decirnos que había que aprender a coexistir con el virus.

Ya está bien de que hay que bajar  la curva y sandeces por el estilo. ¿O es que el hecho de que un tercio del planeta apostara y haya conseguido extirpar el virus no es prueba suficiente para dejar la cantinela de aplanar curvas y dar la consigna de extirpar totalmente el virus?Eso explica en buena parte, el porqué fuimos los primeros de Europa en número de rebrotes y el porqué por jugar al paso corto de salvar la navidad, demos lugar a que no solo no la salvemos, sino acaso tampoco la semana santa.

5ª)No se hizo ninguna etapa de desescalada, se hizo de golpe y porrazo, una veloz desbandada

¿En qué cabeza cabe, que la “desbandada” se empezara a ejecutar por provincias enteras, con derecho a trasladarse desde las grandes poblaciones a sus segundas residencias?¿Tan ignorantes son nuestros mandamases como para desconocer que en la España Rural del Interior vivimos seis millones de habitantes, la mayoría de edad avanzada, que supone más del 70% de la superficie de todo el país?¿Tan enajenados estaban de por dónde andaba el virus, como para no darse cuenta que la España Rural Interior no estaba contagiada y que, con su acuerdo de “desbandada” por provincias, nos trajeron el bicho donde no lo teníamos, causandonos con ello muchísimas muertes, todas evitables? ¿Es que   ni siquiera saben ver que la geografía docente provinciana que les enseñaron en el instituto la universidad, no tiene nada que ver absolutamente nada con la geografía real existente que se ha ido configurando por comarcas naturales, cuya mayoría de provincia tenían en su interior dos tercios?! de .que no estaba contagiada                                
Las principales causas  las abordaron muy mal las élites polìticas. Las dramáticas consecuencias que han traído  a la vista está Todos los país sabíamos qué eUe
no se trataba de una calamidad material, sino de algo infinitamente más grave, de un virus que se extendía a velocidad de vértigo y que mataba muchos seres humanos a su paso¿Y cómo siendo así, hubo países que cumplieron cn su deber de ser previsores, de adelantarse lo más posible a los acontecimientos, de ponerse en los peores escenarios y echar manos a la obra para que las muertes en sus países fueron las menores posible?¿Y cómo siendo tan de cajón, que era eso lo que había que hacer, en España nuestras élites políticas estuvieron a otras cosas y dieron lugar a que la mortalidad en nuestro país fuera la mayor del mundo por  por porcentaje de habitantes? ¿Quién responde ahora de un 70 u 80% de muertes que pudieron evitarse con tal de haber tenido la misma previsión que la mayoría de los países?¿Cómo es posible que ante un virus mortal que no entiende de fronteras, que no se

 lleva caralante” bienes materiales, sino seres humanos y que tratándose de salvar vidasno se partiera del principio de guardar toda la política habitual bajo llave y no sacarla a la palestra hasta que el virus no hubiera sido extirpado?¿Cómo nos pueden explicar las élites de las fuerzas políticas que ante un drama  de muertes crueles de seres humanos, no forjaran una estrecha unidad desde arriba,desde el mes de febrero, que hubiera supuesto un factor multiplicador de credibilidad ante la ciudadanía y hubieran creado las condiciones para que el país entero hubiera seguido sus directrices a fin de evitar el mayor número de muertos posible? Cómo asimilar y cómo perdonar que siguieran todas las élites políticas sin excepción con la ceguera de sus luchas partidarias cainitas en el parlamento y en los medios, en vez de dedicar el cien por cien del esfuerzo a evitar el máximo posible de muertes en el país a cuya ciudadanía representaban? ¿Cómo es posible que desde el inicio de pandemia no dedicaran el cien por cien de su esfuerzo a luchar unitariamente a salvar vidas  y mandaran a hacer ostias, entre tanto, el resto de la política?

¿Cómo olvidar y cómo no sentir indignación a que mientras la ciudadanía de todas las tendencias estábamos confinados, la mortalidad aumentando cada día, los hospitales y los sanitarios desbordados y en precario, los mayores en las residencias muriendo como chinches, mezclados a veces los vivos con los muertos y negándoles el derecho de auxilio hospitalario, como es posible, digo, que en tan dramáticas circunstancias, las direcciones políticas siguieran desunidas y dando bochornosos espectáculos de enfrentamientos e insultos en el parlamento?. Menudo ejemplo el suyo.

Vista la diferencia con todos los países que sus fuerzas políticas fueron previsoras, unitarias y dedicaron todos sus esfuerzos a salvar vidas, nada tiene de exagerado afirmar que el ochenta por ciento de los muertos de nuestro país se pudieron evitar.


7ª) Capítulo aparte, Nicolás, para lo que más me llama la atención:
Si unirse como una piña y desde el primer momento para salvar vidas era crucial ¿Cómo es posible que ninguna fuerza (ninguna es ninguna) pusiera sobre el tapete una sola propuesta apelando y urgiendo a la unidad?
¿Como ninguna fuerza apeló a poner manos a la obra, a evitar masificaciones en los comercios, en las plazas, en el transporte, en actos religiosos, culturales, sociales, etc, como sí se hizo desde febrero, por ejemplo, en países como Grecia y Portugal de cultura y costumbres parecidas a las nuestras?
Si al menos alguna fuerza hubiera intentando alguna propuesta unitaria y a tiempo, ahora tendríamos que valorarla como una fuerza completamente distinta al resto, aunque no hubiera conseguido sus propósitos, como una fuerza ejemplar, en contraste con el pésimo ejemplo de las demás. Y que nadie nos venga con cuentos ni excusas, que para proclamar y defender sin descanso una unidad real, no hacía falta ni ser del gobierno de yuxtaposición ni ser de la oposición. Sólo hacía falta querer hacerlo. Ninguna fuerza lo intentó siquiera y todas son responsables por igual de este deplorable malhacer político, q es la d unirse como una en torno a un solo punto temporalmente: Extirpar el virus. Por desgracia, en este caso concreto, se ha cumplido al pie de la letra eso que tanto molesta a las direcciones políticas: Que todos son iguales


8ª) La gerontofobia mayoritaria existente en Europa y en España también es otra causa importante de tanta mortalidad.

Lo mucho que ha perjudicado la gerontofia mayoritaria existente en Europa y en España , lo demuestra el propio sondeo de la Organización Mundial de la Salud a 83.000 personas de 57 países, donde se comprobó que la gerontofobia, en mayor o menor grado, es un mal que afecta a los derechos humanos y que lo tiene el 60% de la ciudadanía, siendo mayor el porcentaje en los llamados países occidentales. Esta es otra causa más que añadir a las anteriores, que tan malas consecuencias han traído en nuestro país. Causa  muy profunda que tiene muchas vertientes y que es difícil desenmascarar porque tiene una cara A de apariencia humana y una cara B demasiado cruel y ambas coexisten en el seno de las personas que la padecen. Profundizaremos este tema en el ensayo. Ahora me limito a descalificar la frase que tan  pocas veces se dice en público y tantas de forma un poco más privada: "BAH TAMPOCO ES TAN GRAVE. CASI TODOS LOS QUE CASCAN SON VIEJOS."


9ª)¿Y qué se está haciendo para cambiar la inmundicia de muchas residencias?

¿Por qué cinco meses después que se vio lo que se vio y se hizo lo que se hizo en las residencias de mayores sigue sin abordarse y corregirse a fondo el drama de las residencias de mayores ¿Por qué no se ha formado aún una comisión que investigue las denegaciones de auxilio hospitalario a la mayoría de los moradores de las residencias de mayores Una comisión que no se conforme sólo en sacar conclusiones para no repetir errores, sino en ver en cuántas CCAA se han podido cometer posibles homicidios imprudentes, por ciertos políticos que hayan dado órdenes de denegación de auxilio hospitalario, que como se sabe es un delito penal con cárcel?.

¿Por qué  no se ha investigado todas ellas y a tenor de lo visto cerrar las que tengan unas condiciones inmundas, hacer un protocolo de mínimos que garantice a los mayores una vida digna y de calidad con ratios adecuadas, con la asistencia sanitaria necesaria, etc, amén de establecer mecanismos fiables de control fiables que garanticen que se cumplen todas las normas etc.? Que todo eso siga sin hacerse aún sin hacerse y que los ministros del gobierno y los Consejeros de las CCAA que tuvieran que ver con este trabajo, no sólo no lo hayan hecho, sino que además, varios de ellos se marcharan de vacaciones es algo que no cabe en la conciencia de ningún ser humano.

Por el contrario, se sacó el problema des discurso público, no sólo por los políticos, sino por los pesebreros mediáticos. Y ya sabemos aquello de que todo lo salga en los medios no existe.

10) Hay más temas que saldrán en el ensayo, pero no hay espacio

 para desarrollarlos en este artículo

 Dichos a modo de meros titulares me quedan en el tintero:

La atención a las personas mayores impedidas y la asistencia a domicilio en general Cómo abordar las necesidades sociales más perentorias en general ya que tal y como están las cosas con la inyección del dinero europeo no llega ni de lejos La necesidad de reducir el gasto en las administraciones por arriba entre 20 y 25 mil millones anuales, depurando enchufismos, nepotismos, duplicidades... y demás gastos innecesarios y aumentar los ingresos en 15.000 millones anuales del dinero que debe la banca por los rescates. La evidencia de que ante pandemias que no entienden de fronteras debe de haber un mando único para estos casos y las CCAA ser las ejecutoras de aplicar los acuerdos. El convencimiento de que es prácticamente imposible extirpar el virus en España mientras no se extirpe el eje central de Madrid. La influencia que haya podido tener la ley del péndulo que de forma tan aguda se da en la sociedad de nuestro país entre las viejas y las nuevas generaciones. Fomentar la educación cívica, colectiva y solidaria en la ciudadanía, cuyo ejemplo más palpable  nos lo han dado los países asiáticos

martes, 3 de noviembre de 2020

CARTA DE CICERÓN A MI MADRE

 

Carta de Cicerón a mi madre

Me parece trágico, tantos siglos después, que la discriminación por edad se haya convertido en algo tan cotidiano como opresor




                            Busto de Cicerón. MUSEOS CAPITOLINOS.

La semana pasada mandé a mi madre por WhatsApp el chiste del año, “25 de diciembre. Zoom, Zoom, Zoom” pero no le hizo ninguna gracia: “A mi edad cada año significa un año menos. A la tuya es todavía uno más”, dijo. Yo intenté consolarla sin éxito, porque como bien explica Martha Nussbaum, para hablar convincentemente de la vejez, como mínimo hay que acercarse a ella. Entonces se me ocurrió pedir ayuda a Cicerón, viejo colega. Pensé que el autor de De Senectute, la apología de la vejez escrita hace más de 2000 años, podría consolarla mejor que yo. Como era de esperar, Cicerón no se ha jubilado ni muerto. Y enseguida me hizo llegar esta carta por mail que ya envié a mi madre y comparto también con vosotros, por si fuera de vuestro interés.


Querida Esther

Lamento que te haya tocado iniciar la última etapa de tu vida inmersa en un discurso político y social que desprecia a los mayores. Lamento también la pandemia aunque te confieso que no parece tan grave cuando llevas dos mil años bajo tierra, bien sabes tú que todo es cuestión de perspectiva, por más que quienes gobiernen carezcan de ella. Lo que sí me parece trágico, tantos siglos después, es que la discriminación por edad se haya convertido en algo tan cotidiano como opresor.

Debes saber que no sois la primera generación que padece este maltrato. También yo pasé por lo que ahora sientes. “Cuando lo medito en mi interior, encuentro cuatro motivos por los que la vejez puede parecer miserable”, escribí entonces. “La primera, porque aparta de las actividades; la segunda, porque debilita el cuerpo; la tercera, porque priva de casi todos los placeres; la cuarta, porque no está lejos de la muerte”. Ayer tu hija me contó que la pandemia ha agravado los cuatro motivos. Y que los ancianos están siendo aniquilados, no ya tanto por el virus como por una sociedad que los considera inútiles e incapaces, carentes de iniciativa, además de una carga. Una consideración que afecta por igual a todos los de tu edad, sin importar las situaciones personales. Por eso te incluye también a ti, que te sentías joven cuando empezó el confinamiento. Sin embargo, ahora ya te piensas más inútil y acabada. Debes saber que es el efecto de su manipulación, no de tu edad.

Dicen que la Covid ha apartado aún más a los mayores de las actividades cuando es una mentira demostrable. Desde luego lo es en tu caso. Me cuenta tu hija que ahora escaneas códigos QR en los restaurantes, que mandas audios por WhatsApp, haces videoconferencias con tus nietas, viajas por YouTube y que hasta te has pasado a la banca digital. TikTok no sé aún lo que es, pero ya me lo contarás. Eso no es estar más lejos de las actividades. Lo que pasa es que has rejuvenecido. Y los jóvenes se pasan el día pegados al móvil. Esa es su actividad.

En cuanto a que la vejez debilita el cuerpo es un hecho. Pero en una pandemia como la que vivís, el cuerpo no es lo más importante. Si acaso el problema lo tendrán los jóvenes que tienen que encerrar el suyo cargado de hormonas en pequeñas habitaciones. Tú lo disfrutaste sin entregar una pizca de belleza o vigor a la enfermedad o al miedo. Es precisamente ahora cuando sirve más el amor que el vigor. Más la experiencia que la fuerza. Los más jóvenes necesitan que estés a la altura. “A duras penas podríamos decir que un capitán de barco es incompetente porque no pueda remar”. Dicen que esta frase también es mía. Y me encanta.

Luego está lo de que los viejos no tenemos placeres, que probrecitos, qué pena de vida. Pero di la verdad. Si estás ahíta de placer. Todas las fiestas, tantos platos en tantos fregaderos como cigarros en ceniceros, tanta música, tantas reuniones familiares, tantos nietos tantas veces, tantas risas, tantos bailes. ¿Sabes ese momento de la fiesta en que uno se pregunta hasta cuándo será obligatorio seguir divirtiéndose? Ese momento solo lo entenderán quienes han acumulado tanto placer como para saber que estar libre de su tiranía es una forma de felicidad. Y a ti te la han puesto en bandeja, en el mejor momento. Disfrútala sin culpa antes de que los hijos y nietos te llenen la casa de ruido otra Navidad.

Y por último queda el tema de la muerte, la mentira más grande de todas. Que el virus os acerca más a ella. Que los viejos sois los peor parados, los más frágiles, los que más crudo lo tenéis, los que hay que proteger, los que no pueden ya decidir por sí mismos. ¡Qué clase de manipulación de la voluntad y control del cuerpo es esta! Tú no lo tienes peor que los más jóvenes ante la muerte, si acaso mejor. Porque mientras ellos esperan vivir más que tú, el hecho es que tú has vivido ya más que ellos. La covid puede afectar a cualquiera, como toda enfermedad. Nadie es dueño del mañana. Así que ni se te ocurra tener miedo, eso déjaselo a los jóvenes cuyo futuro es más incierto de lo que fue nunca el tuyo. Recuerda que la enfermedad del alma puede hacerte tanto daño como la del cuerpo, incluso más llegados a cierta edad. Porque tu cuerpo ya no es tan valioso mientras que tu espíritu no conoció momento más pleno. Sabes más, amas mejor, entiendes más. En este momento debes protegerte tanto del virus como de aquellos que intentan convertir tu edad en un problema que no tenías antes de conocerlos.

Defiéndete, amiga, porque te atacan. Y dale un beso a tu hija de mi parte. Ten paciencia con ella, aún es demasiado joven.

Nuria Labari es periodista y escritora.